Debido al proceso de desalojo de la sede de la Contraloría por el vencimiento del contrato de arrendamiento, que se cumple hoy miércoles, el jefe de la entidad Edgardo Maya Villazón declaró a través de una resolución estado de urgencia manifiesta, con el fin de suspender del 1 y hasta el 20 de enero los términos de los diferentes procesos que se adelantan en la entidad.

A través de la mediante Resolución 0155 del 30 de diciembre de 2014, El Contralor General, declaró la urgencia manifiesta en el organismo de control, con el fin de atender la situación de emergencia que enfrenta la entidad.

«De esta forma se pretende además, garantizar la continuidad del servicio público y de las funciones constitucionales, legales, tecnológicas y logísticas de la Contraloría, así como los derechos de los trabajadores y de los ciudadanos», se lee en un comunicado.

Igualmente mediante el acto administrativo expedido, Maya suspendió las actividades administrativas y misionales durante el término de 72 horas.

Cabe resaltar que los empleados y funcionarios de la Procuraduría General presentaron el día de ayer un recurso de coadyuva a las acciones de tutela presentado por la Contraloría y La Defensoría del Pueblo, para frenar “el cierre abrupto” del órgano investigador, pues aducen a través del manifiesto, que el desalojo pone en riesgo la función pública estatal, y por cuanto, el control fiscal, pilar fundamental en el estado de derecho, además de declarar que se ponen en riesgo los recursos públicos, el patrimonio del Estado y se afectan los derechos de los ciudadanos en general.