Nacional

Una de cada cuatro botellas de licor que circulan en Colombia es ilegal

Imagen de Archivo Imagen de Archivo[/caption]
Así lo reveló estudio de Euromonitor presentado durante el Segundo Congreso Internacional sobre Falsificación, Adulteración y Contrabando de la ANDI.

Durante el 2014, la industria formal de Colombia perdió 1.391 millones de dólares por cuenta del mercado ilegal y el Estado dejó de percibir 423 millones de dólares. Esa es una de las conclusiones del más reciente informe sobre mercado ilegal de licor en la región revelado por la firma Euromonitor, durante el Segundo Congreso Contra la Falsificación, Adulteración y Contrabando que se realiza en el Centro Social de Oficiales de la Policía Nacional en Bogotá.

De acuerdo con el informe, el 36 por ciento del licor ilegal que circula en Colombia es de contrabando. Esto quiere decir que en el país predomina el riesgo sanitario, dada la alta participación de falsificaciones en el mercado.

En ese sentido, Euromonitor, que ha realizado el informe por cuatro años seguidos, dice que Colombia no ha mejorado su estadística al respecto. Por el contrario, cada nuevo reporte muestra un crecimiento moderado de la ilegalidad en este sector: en 2013 el porcentaje de licor ilegal era 24,3 por ciento y para el 2014 subió 0,5 puntos porcentuales a 24,8 por ciento.

Según explicó Lourdes Chavarría, consultora de Euromonitor, esto también quiere decir que en el país una de cada cuatro botellas de licor que circulan es ilegal.

Cuando se analizan la estadística en la región, Brasil ocupa el primer lugar de este mercado ilegal con un 28 por ciento, seguido de Perú, Ecuador, y Colombia (24,8%). El análisis hecho por la firma muestra que en estos países el licor ilegal que se ofrece a los consumidores es 19,8 por ciento más barato que el legal.

La firma señala que estas cifras son impulsadas por la poca regulación que hay sobre el etanol, la creciente carga impositiva para los jugadores legales y el débil cumplimiento de las leyes. Todo lo anterior conlleva a la competencia desleal y el deterior de algunas marcas.

Sin embargo, propone cuatro medidas para mitigar los daños y frenar el avance del mercado ilegal. La primera es un trabajo coordinado con el sector público y privado para generar estrategias integrales para luchar contra el delito. La segunda propone revisar el marco legal existente, la tercera busca implementar mecanismos efectivos para el control del etanol y la última sugiere intensificar las campañas de educación al consumidor.