Comienza puja por el reajuste del salario mínimo; trabajadores piden 12% y empresarios sugieren 4.5%
–Con la presentación de las cifras de productividad por parte del Departamento Nacional de Planeación comienzan las negociaciones para fijar el reajuste del salario mínimo para 2018 entre centrales obreras, empresarios y el gobierno, proceso que se extenderá hasta el 15 de diciembre cuando vence el plazo para que se llegue a un acuerdo o de lo contrario el incremento se hará por decreto.
Como siempre, las posiciones entre trabajadores y empleadores arrancan bien separadas. Los representantes de las centrales obreras demandan un incremento entre 10 y 12 por ciento, mientras por los empresarios plantean que el ajuste no puede superar el 4.5 por ciento. Al menos esto es lo que ha sugerido con mucha anticipación la Asociación Nacional de Instituciones Financieras, ANIF, que agrupa al sector financiero del país.
Este martes, en la primera sesión de la Comisión Permanente de Concertación de Políticas Laborales y Salariales, se producirá la intervención de los Ministerios del Trabajo y Hacienda y el Departamento Nacional de Planeación, DNP.
Para mañana miércoles se prevé la presentación de las valoraciones de la situación económica del país sobre las cuales se fija el incremento del salario mínimo, como son el Índice de Precios al Consumidor (IPC) del año causado y su proyección para el siguiente; el Producto Interno Bruto, PIB del presente año y su proyección y el aporte de la productividad al crecimiento de la economía.
Para la próxima semana está programada la fijación de posiciones por parte del sector empresarial y las organizaciones sindicales.
POSICIONES DE TRABAJADOREs Y EMPRESARIOS
Las centrales obreras CUT y CGT ya destaparon sus cartas. Y el Banco de la República ha propuesto la implementación de un salario diferencial acorde con la productividad de las regiones, buscando reducir la informalidad laboral en las ciudades del país.
“Proponemos que ciudades más productivas tengan un salario mínimo superior al de otras de baja productividad, esto permitiría un balance entre productividad laboral y salario mínimo que no dificulta la demanda de trabajo formal”, precisa el informe Borradores de Economía realizado por los investigadores Luz Flórez y Luis Arango.
La Central Unitaria de Trabajadores, CUT, anunció que presentará una propuesta del 12% para el incremento del salario mínimo del 2018, teniendo en cuenta el comportamiento de la economía del país y los elementos definidos por la Corte Constitucional que inciden dentro de los cálculos para determinar el aumento del salario.
“Nuestra propuesta del 12% para iniciar las negociaciones está determinada por las variables definidas por los fallos de la Corte Constitucional como el Producto Interno Bruto, el índice de inflación, participación de los ingresos en los trabajadores y la productividad, y es allí es donde tenemos mayor controversia con los empresarios y el gobierno porque nosotros hablamos de la productividad del trabajo que es mayor que la productividad factorial”, aseguró Luis Alejandro Pedraza, presidente de la CUT.
Añadió que la CUT buscará un acercamiento con las centrales sindicales CTC y CGT, para llevar una propuesta unificada ante la Comisión Permanente de Concertación de Políticas Laborales y Salariales aunque ha sostenido que no tiene mayores expectativas frente a la negociación del salario mínimo este año si el gobierno mantiene su política de ligar los incrementos a la inflación causada.
A su turno, la Confederación General del Trabajo, CGT, planteó que el salario del año entrante de 2018 debe reajustar en cinco puntos por encima del índice de la inflación total de 2017.
El presidente de la CGT, Julio Roberto Gómez Esguerra aseguró que con diferentes argumentos, los presidentes de la República y sus equipos económicos han sometido a los trabajadores a devengar salarios de hambre pero se niegan a adoptar medidas de fondo para combatir la corrupción y la inaceptable voracidad del sistema financiero, dos de las causas más importantes de las cíclicas crisis económicas de Colombia.
Hasta ahora, la única organización empresarial que ha fijado su posición frente al incremento es la Asociación Nacional de Instituciones Financiera, ANIF, que ha recomendado que el reajuste del salario mínimo no desborde el 4.5% para 2018, cifra que resulta de sumarle a la inflación (4.2%) unas ganancias de Productividad Laboral , PL, del 0.3%.
De acuerdo con la propuesta del sector financiero del país, el salario mínimo pasaría de 737 mil 700 pesos mensuales a 770 mil 900 pesos.
Según ANIF, un mayor incremento tendría el riesgo de mermar la buena generación de empleo que se ha tenido durante 2017, debido a las rigideces estructurales del mercado laboral colombiano.
Además ha señalado que el próximo gobierno de 2018-2022 deberá estudiar cuidadosamente cómo superar dicha inflexibilidad laboral, siendo los principales escollos: i) los elevados costos no salariales, los cuales bordean el 50% aun después de la reducción de 13.5pp ordenada por la Ley 1607 de 2012; y ii) los elevados costos de despido que enfrentan las firmas (representando casi 60 semanas de salario para trabajadores con más de 20 años de antigüedad; para el caso de 5SML, este sobrecosto se eleva a $50 millones por trabajador
Pese a las marcadas diferencias, la ministra del Trabajo, Griselda Janeth Restrepo Gallego, se ha declarado confiada en lograr un acuerdo en torno al ajuste del ingreso mínimo para 2018, hecho que en el gobierno del presidente Juan Manuel Santos se alcanzó en 2011 y 2013. La concertación fracasó en 2012, 2014, 2015 y 2016.
