Internacional

Lula da Silva ya no será candidato a la presidencia de Brasil

El expresidente Luiz Inácio Lula da Silva desistió de disputar la Presidencia en las elecciones del 7 de octubre próximo y anunció a su exministro Fernando Haddad, que era su compañero de fórmula, como el nuevo abanderado del Partido de los Trabajadores (PT).

La decisión de Lula fue comunicada por la dirección del PT en la ciudad de Curitiba, en donde el expresidente comenzó a purgar desde abril su condena de 12 años de prisión, y se produjo en el último día de plazo que la formación tenía para anunciar a su nuevo candidato presidencial tras la decisión del Tribunal Electoral de inhabilitar al expresidente.

Haddad, exalcalde de Sao Paulo, de 55 años de edad, mantuvo el lunes varias reuniones con Lula y este martes por la mañana volvió a visitarlo. El Tribunal Superior Electoral (TSE) invalidó el 1º de septiembre la candidatura de Lula, de 72 años de edad, a causa de su situación judicial, y emplazó al PT a designarle un reemplazante antes de este martes a las 19H00 locales (22H00 GMT), so pena de quedar excluido de los comicios del 7 de octubre.

Los abogados de Lula presentaron sin éxito varios recursos para extender el plazo hasta el 17 de septiembre. También alegaron en vano la necesidad de acatar un pronunciamiento del Comité de Derechos Humanos de la ONU para que Lula pueda ser candidato y hacer campaña desde la cárcel.

Lula, identificado con los programas sociales que durante sus dos gobiernos permitieron sacar de la pobreza extrema a millones de brasileños, era el gran favorito en los sondeos. Su intención de voto subió incluso después de ser condenado como propietario de un apartamento en el litoral paulista, ofrecido por una gran constructora a cambio de su mediación para obtener contratos en Petrobras.

El exlíder sindical, objeto de otros cinco procesos, se declara inocente en todos y denuncia un acoso judicial y mediático para impedir que el PT vuelva al poder. El PT ganó las últimas cuatro elecciones presidenciales, dos con Lula (2002 y 2006) y dos con su heredera política, Dilma Rousseff (2010 y 2014), destituida en 2016 por el Congreso, bajo la acusación de manipular las cuentas públicas. Fue sustituida por su viceconservador, Michel Temer, acusado de «golpista» por el PT. Con información de EFE.