Mientras que la capital del país alcanzó, entre 2003 y 2004, su época más crítica de secuestros con 183, en 2007 este flagelo disminuyó a 51 casos. Es decir que en los últimos cuatro años el secuestro se redujo en 132 casos.

Así los revela un informe de la Veeduría Distrital ‘Condiciones de Seguridad en Bogotá 2007′ que señala, además, que si se compara con el comportamiento de la última década, el del 2007 es el tercer indicador más bajo, después de lo registrado en 2005, con 33 secuestros; y del 2001, que reportó 49 casos.

De acuerdo con el informe del ente de control, de los 51 hechos registrados en 2007, 34 se presentaron con fin extorsivo y 17 fueron catalogados como secuestro simple. Los hombres fueron las principales víctimas con 35 casos, frente a 16 secuestros de mujeres. La delincuencia común sigue siendo la principal causante de este flagelo.

Pero no sólo el secuestro alcanzó disminuciones importantes. La reducción en delitos contra el patrimonio, es decir, atracos a personas, hurto de vehículos, establecimientos comerciales y motos, también deja tranquilos a los capitalinos.

Por ejemplo, en 2007 hubo 12.037 hurtos a personas, 718 casos menos que en 2006, cifra muy positiva si se tiene en cuenta que este delito es el de mayor ocurrencia en la ciudad. Según el informe, en la localidad de Chapinero fue donde más ocurrieron estos hechos, seguidos de Santa Fe, Candelaria y Teusaquillo.

El hurto de vehículos, el cuarto delito más frecuente, también disminuyó, al pasar de 3.622 casos en 2006 a 3.137 en 2007. Las localidades donde se presentó el mayor número de hurtos de esta modalidad delictiva fueron Suba, Kennedy y Usaquén.

Para el caso del hurto a establecimientos comerciales hubo una disminución de 921 casos y para robo a motocicletas se reportaron 186 casos menos que en 2006. En hurto a entidades financieras, el indicador se mantiene como delito de menor ocurrencia, con seis casos en 2007.

En contraste, las autoridades deben concentrar sus esfuerzos para reducir los indicadores de hurto a residencias, el segundo de mayor ocurrencia en Bogotá, pues en 2007 se aumentó en 230 casos con relación al periodo anterior.

La Veeduría Distrital hizo un llamado a las autoridades para aumentar las restricciones al porte de armas, así como fortalecer las campañas de entrega voluntaria de las mismas, pues de todas las modalidades de muerte violenta, los homicidios siguen ocupando el primer lugar con 1.393 casos en 2007, ocasionados por riñas, atracos y venganzas.|

El organismo de control considera necesario revisar la normatividad que regula la circulación de motos, pues su proliferación incidió en un incrementó del 29.7 por ciento en los índices de muerte en la ciudad. Vale anotar que los accidentes de tránsito son la segunda causa de muerte violenta en Bogotá y los motociclistas son los más afectados después de los peatones.