El ecuatoriano Julio César Vizuete, quien fué escribano del cabecilla de las Farc ‘Raúl Reyes’, dijo hoy que los escritos presentados como diarios del guerrillero «son solamente cuadernos de trabajo» de su autoría dentro de la elaboración de un libro sobre el insurgente.
«Los diecisiete cuadernos en ninguna manera son diarios, son simplemente cuadernos de trabajo», señaló Vizuete a radio Sonorama tras precisar que él no es «escribano de nadie», ni lleva «diarios de nadie».
Según afirmó Vizuete, que se ha desempeñado muchos años como profesor universitario, él «simplemente iba a escribir un libro sobre un personaje de trascendencia (Reyes), dentro de la subregión andina» y rechazó que eso implique que tuviera alguna «actividad política con él ni ninguna clase de relación».
Aseguró que, de todo el material de trabajo, que según su versión, quedó registrado digital y magnéticamente, él solo tiene lo que conserva en su «memoria y algunas notas».
Los registros están «quién sabe dónde y bajo el control de quién sabe qué persona», dijo.
De acuerdo con sus declaraciones fue el líder de las Farc quien le pidió que hiciera «un libro sobre su pensamiento, sobre su rol dentro de la geopolítica de la subregión andina» y señaló que los trabajos tenían una metodología «muy concreta».
«La técnica de trabajo era muy concreta: realizábamos diálogos o conversaciones cuando las circunstancias lo permitían, que eran mantenidos en registros magnéticos y luego, en la noche, yo hacía notas y se las presentaba para que las revisara», indicó.
«Cuando el trabajo estuviera terminado y (Reyes) estuviera plenamente satisfecho autorizaría su publicación», pero «vino el ataque de Angostura, se perdieron los cuadernos y quién sabe qué destino tuvieron tanto las grabadoras como los registros digitales de las conversaciones», dijo.
El ataque de Angostura fue una operación de las Fuerzas Militares de Colombia, sin aviso ni permiso, en un enclave selvático ecuatoriano con ese nombre, donde la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) mantenía un campamento clandestino en el que se encontraba Luis Édgar Devia, alias «Raúl Reyes».
La operación, llevada a cabo el 1 de marzo de 2008, produjo la muerte de al menos 26 personas, entre ellas Reyes, cuatro estudiantes mexicanos y un ciudadano ecuatoriano, así como la ruptura de relaciones diplomáticas entre Quito y Bogotá, pues Ecuador consideró que se había violado su soberanía territorial.
Vizuete aseguró que las reuniones que mantuvo con Reyes fueron «en suelo colombiano» y que ese fue uno de los requisitos que él pidió para llevar adelante el trabajo.