Bogotá

Distrito beneficia con atención visual y auditiva a 8.500 estudiantes

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La Secretaría de Educación del Distrito ofrece atención visual y auditiva en 163 colegios de las localidades de Usaquén, Chapinero, Santa Fe, San Cristóbal, Usme, Tunjuelito, Bosa, Kennedy, Fontibón, Engativá y Suba, con una cobertura de 8.500 estudiante, entre los 3 y 18 años.

Esta estrategia busca mejorar la salud visual y auditiva, impactando el rendimiento académico, la convivencia escolar y la calidad de vida de niñas, niños y adolescentes de los colegios oficiales de Bogotá.

Para el logro de estos objetivos y consciente de los altos niveles de las alteraciones visuales y auditivas en la población escolar, la entidad establece un Convenio con la Clínica de Optometría de la Universidad de La Salle.

Con las acciones realizadas en el marco de este convenio se pudo estimar que la incidencia de los problemas visuales en niños y jóvenes en etapa estudiantil ha aumentado en los últimos años.

Es más, en el año 2011 en un estudio realizado por la Universidad de La Salle se encontró que cerca de un 80% de los problemas visuales de los estudiantes son prevenibles o tratables.

Por tanto, la Secretaría de Educación se propuso disminuir el problema no solo con jornadas de atención sino acompañando su estrategia con talleres lúdicos de salud visual y auditiva, dirigidos a estudiantes de los ciclos 1, 2 y 3 para identificar los síntomas y saber a quién acudir en caso de presentarse algún problema.

En el primer semestre del 2013 se desarrollaron 60 actividades lúdicas coordinadas por profesionales de la Clínica de Optometría de la Universidad de La Salle, quien con el apoyo de los docentes trabajaron con 1.800 estudiantes en detección de alteraciones visuales y auditivas.

Al finalizar este año, la Administración del alcalde Gustavo Petro invertirá 240 millones de pesos, con una contrapartida de 72 millones por parte de la Universidad, para atender alteraciones visuales y auditivas de 10.000 estudiantes.

Estas jornadas de prevención, atención y donación de lentes han permitido a los estudiantes, que por sus condiciones sociales no podían acceder a este servicio tener la posibilidad de obtener un diagnóstico sin ningún costo y una atención oportuna que les permita solucionar la alteración detectada para mejorar su rendimiento académico.