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Comunidad Internacional rechaza Asamblea Constituyente de Maduro

Foto presidencia venezolana sobre votantes
–Hasta ahora, sólo tres gobiernos del continente americano han expresado su apoyo al presidente venezolano Nicolás Maduro y la elección, este domingo, de su Asamblea Nacional Constituyente. Son ellos, Bolivia, Nicaragua y El Salvador.

El resto de gobiernos, comenzando por Colombia, por separado, han notificado su rechazo y condena por la forma como Maduro impuso a la fuerza esa Constituyente.

Además del ejecutivo colombiano, se han manifestado en contra del proceso electoral en Venezuela, Estados Unidos, Argentina, Costa Rica, México
Perú, Panamá, Paraguay, Brasil, Chile, Guatemala.

Igualmente se han pronunciado en contra España y la Unión Europea.

De antemano, los gobiernos de EE.UU., Colombia, Canadá, México, Panamá y Perú anunciaron que tomarán medidas contra Venezuela.

Precisamente, el gobierno de los Estados Unidos, en una declaración que emitió a través del Departamento de Estado de Estados Unidos condenó «las elecciones impuestas el 30 de julio con el fin de elegir a una Asamblea Nacional Constituyente» y advirtió que continuará «adoptando medidas enérgicas y expeditivas contra los artífices del autoritarismo en Venezuela».

El ejecutivo estadounidense advirtió que la Constituyente pretende «reemplazar a la Asamblea Nacional que fue elegida en forma legítima, y debilitar el derecho del pueblo venezolano a la autodeterminación».

«Estados Unidos apoya al pueblo de Venezuela, y a sus representantes constitucionales, en su intento por volver a convertir a su país en una democracia plena y próspera. Seguiremos adoptando medidas enérgicas y expeditivas contra los artífices del autoritarismo en Venezuela, incluidos aquellos que participen en la Asamblea Nacional Constituyente como resultado de la elección viciada del día de hoy», afirma la declaración.

El Departamento de Estado reconoce en cambio que «el 16 de julio, millones de venezolanos expresaron abrumadoramente —con una voz alta y clara— su rechazo a una Asamblea Nacional Constituyente concebida para debilitar la democracia en Venezuela», pero indica que el presidente Maduro «ha dejado de lado las voces y las aspiraciones de la población venezolana».

Asimismo condena «el uso de la violencia por el régimen de Maduro contra ciudadanos que ejercen sus derechos de libertad de expresión, asociación y reunión pacífica» y ofrece condolencias a quienes han perdido a seres queridos durante las protestas.

Finalmente el Departamento de Estado «instó a los gobiernos del hemisferio y de todo el mundo a tomar medidas contundentes para que rindan cuentas todas las personas que socavan la democracia, niegan los derechos humanos, sean responsables de hechos de violencia y represión, o participen en prácticas corruptas».

Por su parte, el parlamento de la Unión Europea notificó que desconoce la Constituyente en Venezuela por considerar que «no respeta los principios democráticos y que no va a traer la paz ni la solución a la crisis, sino que exacerbará las divisiones y los enfrentamientos».

En su declaración califica la convocatoria de Nicolás Maduro como “una medida inaceptable, tanto en su forma como en su contenido, que suscita serias dudas sobre su constitucionalidad y amenaza los principios esenciales de la democracia, como el sufragio universal, libre, directo y secreto”.

La declaración del cuerpo legislativo europeo considera que la Asamblea Constituyente no respeta los principios democráticos y que no va a traer la paz ni la solución a la crisis, sino que exacerbará las divisiones y los enfrentamientos.

“Además, como ha afirmado el presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana, monseñor Diego Padrón, dicha Asamblea dará lugar a la instauración de un régimen dictatorial, al reducir por entero las competencias de los diputados a la Asamblea Nacional democráticamente elegidos”.

Por lo tanto, afirma que el Parlamento Europeo “no reconocerá los resultados de este procedimiento, conducente al establecimiento ilegal e ilegítimo de la Asamblea Nacional Constituyente”.

El documento también afirma que con las elecciones del domingo 30 de julio, por su diseño, violan el principio democrático de universalidad del voto.

“Las fuerzas de la oposición, que ostentan la mayoría en la Asamblea Nacional, denunciaron el Decreto 2830 de 1 de mayo como un ‘autogolpe’, que socava la autoridad del presidente Maduro y del Gobierno venezolano, apoyándose en los artículos 333 y 350 de la Constitución. El número de muertos crece a diario y la población sufre la carestía de medicinas y alimentos. La última manifestación de este caos flagrante fue el asalto a la Asamblea Nacional por parte un grupo de agresores progubernamentales armados, durante el cual los representantes del pueblo fueron tomados como rehenes durante varias horas, y algunos de ellos fueron víctima de robos y heridas de gravedad”.

El Parlamento Europeo recordó ejemplos “inaceptables” de falta de respeto del Estado de Derecho, “como el debate en el Tribunal Supremo de Justicia sobre la posibilidad de llevar a juicio a la fiscal general, Luisa Ortega Díaz, después de que manifestase su desacuerdo con el Gobierno y criticase algunas de sus decisiones”.

La resolución celebra “la salida de la cárcel de Leopoldo López, quien se encuentra actualmente bajo arresto domiciliario” e insta al gobierno a restaurar sus derechos civiles y políticos. “Insistimos en que las elecciones son, en la actualidad, la única vía pacífica y democrática de resolver la situación en Venezuela. La celebración de unas elecciones pluralistas daría realmente la palabra a los ciudadanos. Además, exigimos al Gobierno de Venezuela que libere a los aproximadamente 500 presos políticos, restaure las competencias de la Asamblea Nacional y garantice el acceso de la población a la ayuda humanitaria, en particular alimentos y medicinas. Asimismo, debe establecerse a la mayor brevedad un mecanismo para que la Unión proporcione apoyo humanitario al pueblo venezolano”.

La declaración está firmada por David McAllister, presidente de la Comisión de Asuntos Exteriores; Ramón Jáuregui, copresidente de la Asamblea Parlamentaria Euro-Latinoamericana; y Francisco Assis, presidente de la Delegación para las relaciones con Mercosur.

ESPAÑA

El Gobierno español en su comunicado afirmó que no reconoce la Asamblea elegida este domingo, a tiempo que anunció que «junto con sus socios de la Unión Europea y países amigos de la región las medidas adicionales que puedan ser efectivas para promover una restauración de la institucionalidad democrática y constitucional en la República Bolivariana de Venezuela».

El siguiente es el texto del comunicado emitido por el Ministerio español de Relaciones Exteriores:

«España lamenta que el Gobierno de Venezuela haya decidido seguir adelante con un proceso constituyente que no es aceptado por la mayoría de los venezolanos y que conculca principios democráticos esenciales.

El Gobierno español condena los actos de violencia y represión que han provocado numerosos muertos en las últimas horas, que se suman a los más de 100 venezolanos fallecidos en protestas generadas por el deterioro de la situación política y económica y a favor de la democracia en Venezuela.

La Asamblea resultante de la votación de hoy no representa la voluntad mayoritaria de los venezolanos, no tiene atribuidas conforme a la Constitución facultades legislativas que corresponden a la Asamblea Nacional y no es la solución a los graves problemas de confrontación política y crisis humanitaria que asolan al país. España no reconocerá una Asamblea Constituyente que no sea resultado de un amplio consenso nacional, elegida conforme a reglas democráticas de sufragio universal libre, igual, directo y secreto. Por ello no podrá reconocer ni dar validez a los actos jurídicos emanados de esta Asamblea Constituyente.

España insta una vez más al Gobierno venezolano a que inicie un proceso sincero de negociación con las instituciones democráticas legítimas y constitucionales de Venezuela como la Asamblea Nacional, y que permita un amplio acuerdo que respete el marco constitucional y garantice la separación de poderes, los derechos humanos y la democracia.

El Gobierno de España estudiará, junto con sus socios de la Unión Europea y países amigos de la región, las medidas adicionales que puedan ser efectivas para promover una restauración de la institucionalidad democrática y constitucional en la República Bolivariana de Venezuela». Fin del comunicado español.

PERU CONVOCA REUNION DE CANCILLERES

Por su parte, el Gobierno peruano convocó a los cancilleres del hemisferio americano para el martes 8 de agosto para analizar la situación de Venezuela, país que vivió comicios para elegir a los representantes para redactar una nueva Carta Magna.

Según un comunicado oficial del Ministerio de Relaciones Exteriores (MRREE) participarían de la cita en Lima los cancilleres de Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Guatemala, Honduras, México, Panamá y Paraguay.

Previamente, mediante otro comunicado oficial y en las redes sociales había acusado de ilegítima dichas elecciones en el país llanero.

«El Gobierno del Perú no reconoce los resultados de la ilegítima elección realizada hoy para conformar una Asamblea Nacional Constituyente en Venezuela. Esta elección viola normas de la Constitución venezolana y contraviene la voluntad soberana del pueblo, representado en la Asamblea Nacional» , se lee en el Comunicado Oficial 026-17.

Por su parte, el Presidente del Congreso Nacional, legislador Luis Galarreta, que asumió tal responsabilidad el pasado 27 de julio por el período legislativo 2017/18, de un año, de la bancada mayoritaria Fuerza Popular (71 de los 130 congresistas), saludó la decisión tomada por el Gobierno del Presidente Pedro Kuczynski.

«Hay que saludar que el Gobierno haya señalado que no va a reconocer los resultados» , expresó en entrevista concedida al programa periodístico-político «Agenda Política» , que se trasmite por señal cerrada.

Galarreta adelantó, además, que se pondrá en contacto con sus homólogos de los parlamentos latinoamericanos para buscar alcanzar una posición colectiva sobre lo que acontece en Venezuela.

Venezuela celebró una jornada electoral para designar a 545 representantes para redactar una Carta Magna, dentro de un ambiente de enfrentamientos permanentes entre el régimen del Presidente Nicolás Maduro y la oposición venezolana desde el pasado 1 de abril. (Con información de CNN, Voz de America y agencia Xinhua)